La bahía de Valparaíso enfrenta una situación crítica, ya que se encuentra en alerta por marejadas anormales que se extenderán hasta el martes 31 de diciembre. Este fenómeno ha llevado a las autoridades a tomar medidas preventivas, entre las que se incluye el cierre de algunas playas y la vigilancia constante de las fuerzas de seguridad.
Operativo por imprudencia de un bañista
Durante la tarde del sábado, un bañista en la playa Acapulco de Viña del Mar generó un operativo por parte de la Policía Marítima y salvavidas. A pesar de la prohibición de ingresar al mar debido a las condiciones del oleaje, el sujeto intentó arrojarse al agua, lo que llevó a las autoridades a actuar rápidamente. Personal de la Armada debió detenerlo y retirarlo del mar, tras lo cual se descubrió que se encontraba en estado de ebriedad.
El capitán de Puerto de Valparaíso, David López, informó que el hecho fue detectado durante los patrullajes realizados por la policía marítima. "Cuando se retira a esta persona que había ingresado al mar, producto del apoyo de los salvavidas, personal de policía marítima identifica que esta persona estaba en estado de ebriedad y efectuó el procedimiento de rigor", explicó el capitán.
Este tipo de incidentes pone en evidencia la necesidad de que los bañistas respeten las advertencias de seguridad emitidas por las autoridades. En el contexto de las marejadas, el riesgo de ahogamiento y accidentes aumenta considerablemente, lo que hace indispensable que se sigan las indicaciones pertinentes.
Medidas de prevención ante las marejadas
Desde el viernes 27 de diciembre, Valparaíso ha mantenido una alerta temprana preventiva por marejadas anormales. Las autoridades han desplegado personal de la Armada en distintos puntos del borde costero para resguardar la seguridad de los veraneantes y evitar situaciones de riesgo. La tarde del sábado, además, se tomó la decisión de cerrar la Avenida Perú en Viña del Mar, una de las zonas más concurridas por turistas y residentes.
El capitán López destacó la importancia de la colaboración entre los salvavidas y las autoridades marítimas. "Hay un trabajo en conjunto con los salvavidas, que están alertando a las personas que llegan al borde costero para que no interactúen con el mar", afirmó. Esta cooperación busca evitar situaciones peligrosas y asegurar que los bañistas respeten las advertencias sobre la peligrosidad del oleaje.
A pesar de que en general la población ha mostrado atención a las recomendaciones de seguridad, las autoridades hacen un llamado a la prudencia. "El llamado es resguardarse, se puede ver incluso en la marejada hasta dónde llega la ola, y la idea es también un poco de sentido común, de criterio, para no arriesgarse", indicó López.
Las marejadas anormales son un fenómeno que ocurre en la costa chilena y pueden ser causadas por diversas condiciones climáticas, como tormentas en alta mar. Estos eventos pueden generar olas de gran altura y fuerza, lo que representa un peligro para quienes se encuentren en la playa o cerca del agua. Por ello, es fundamental que las autoridades mantengan informada a la población y que los bañistas actúen con responsabilidad.
